Cómo elegir la mascarilla correcta


Qué mascarilla CPAP escoger

La mascarilla es una parte vital del tratamiento para la apnea del sueño. Una vez conectada a su aparato CPAP, esta será la encargada de transmitir el aire al usuario. Hay muchos modelos entre los que escoger, y cada uno responde a necesidades diferentes, pero hay ciertos puntos que una buena mascarilla CPAP tiene que cumplir para una buena experiencia de uso:

  • Se tiene que poder ajustar con comodidad y firmeza, para evitar las posibles fugas. Esto hará que el CPAP le transmita la presión prescrita por su asistencia sanitaria con exactitud.

  • Tiene que ser ligera y construida con materiales de calidad, ya que se va a usar a diario y tiene que durar el máximo tiempo posible funcionando correctamente.

  • Es importante que la almohadilla sea suave y blandita, para poder evitar irritaciones o daños en la piel del usuario. Este último punto es importante dado que la mascarilla va a estar puesta durante toda la noche, y si es molesta será complicado seguir con el tratamiento de apnea del sueño.


Tipos de mascarillas CPAP

Existen tres tipos de mascarillas: las nasales, las faciales y las de mínimo contacto. Si desea cambiar su mascarilla es recomendable que reciba la aprobación de su asistencia médica. No existe la mascarilla CPAP perfecta, pero si la que mejor se adapta a cada uno. Encontramos las siguientes diferencias:

  • Nasal:
    Cubre la nariz en su totalidad o su mayoría, proporcionando una buena sujeción y dejando la boca libre. Permite hablar o comer, y tiene la conexión al tubo en la parte frontal. Los modelos que recomendamos son la N20 de Resmed y la Swift FX Nano.

  • Facial:
    Estas mascarillas cubren tanto la boca como la nariz, y son para pacientes que necesitan recibir el aire por ambos sitios. A diferencia de las nasales estas no permiten utilizar la boca libremente. Los modelos que destacamos son la F20 AirTouch y la F20 AirFit, que se diferencian en el tipo de almohadilla; siendo AirTouch un modelo superior.

  • Mínimo contacto:
    Las mascarillas de mínimo contacto solo cubren los orificios de la nariz. Suelen tener un sellado de doble pared para evitar fugas, y el orificio para el tubo en la parte superior. Dan libertad de movimiento y permiten utilizar la boca. En este caso recomendamos la Philips Dreamwear y la Resmed N30i.